lunes, 31 de agosto de 2009

la histora del Girasol Silvestre o la Margarita gigante

oh mi Girasol silvestre o margarita gigante, oh oh oh,
se ocuparse de ti las dulces primaveras venideras
los brugones en los campos bramastan por ti
y o un simple murcielagalos, me acerco a ti del lado izquierdo para no importunar te
tu frilida presencia hace que se me mortirisen los pelitos de la espalda, tu frilido cariño alunado, me abraza con pétalos de Giralos silvestre o margarita gigante,





La margarita gigante o Giralos silvestre, daba un paseo por el mar, viendo una conchita le dijo: oh conchita, mía conchita, conchita en la arena, te saludo yo el girasol silvestre o margarita gigante, dulce amante de la fotografía, y quisiera en una de mis fotos hacerte mía,


Oh el Girasol Silvestre o Margarita gigante dulce y fiel amante de la fotografía

miércoles, 26 de agosto de 2009

Los Nadies, escrito de Eduardo Galeano

Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, ni en lloviznita cae del cielo la buena suerte, por mucho que los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de escoba.

Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada.

Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos:

Que no son, aunque sean.

Que no hablan idiomas, sino dialectos.

Que no profesan religiones, sino supersticiones.

Que no hacen arte, sino artesanía.

Que no practican cultura, sino folklore.

Que no son seres humanos, sino recursos humanos.

Que no tienen cara, sino brazos.

Que no tienen nombre, sino número.

Que no figuran en la historia universal, sino en la crónica roja de la prensa local.

Los nadies, que cuestan menos que la bala que los mata.

martes, 25 de agosto de 2009

ya se termina


últimos días de mi exposición en el Librerinto, y por desgracia solo uno de los animales y cosas de fieltro consiguió casa nueva, pero pronto, pronto, habrá otra

lunes, 24 de agosto de 2009




y nuestras cabezas bien capitadas en sus lugares correspondientes, se sentían frilidas justo al frente a los Murcielagalos